Hasta el 2026 España no recuperará los niveles de desempleo que tenía hasta hace poco, el año 2006. Es más, todavía el 14,5% de la población activa española aún estará desempleada en el año 2015, y los jovenes todavía estarán con una tasa de desempleo tremenda, es decir, malas perspectivas para nuestro país, y lo dice la OCDE, es decir, un organismo con conocimiento de causa.
La conclusión de la OCDE es que realmente la recesion que hubo en el año 2009, que algunos ya lo llaman la Gran Recesión de Europa del 2009, ha inflingido en las economías de todos los países civilizados unas heridas tremendas y que no sera nada fácil hacer que cicatricen. Es más, en esta página ya decíamos a principios del año pasado, y no exagerábamos en absoluto, que el sistema capitalista no iba ya a ser el mismo nunca más: un punto de viraje económico ese año ha pasado y nunca más iba a ser el mismo, ni en las micro ni macroeconomías, ni los bancos ni cajas.
Otro índice económico que hay que tener en cuenta es el Producto Interior Bruto: el PIB español no aumentará más que el 0,9% este año y para el año 2012 fija su previsión de crecimiento en el 1,6%, dos décimas menos que lo que anticipaba en su informe de noviembre. El FMI coincide en eso pues dice que a partir del año 2017 España seguirá sin crecer a más allá de un 2% solamente. Es decir, todos los pasos que durante décadas después del franquismo España había alcanzado, esa gran ventaja con respecto a otros países importantes se ha ido al garete, quizás para siempre.
Hay datos positivos, ya que el Gobierno si que ha conseguido reducir su déficit público bastante (sí, a costa de subir impuestos a todo el mundo…) y eso hace que para el año que viene el déficit público no sea demasiado elevado, pero el problema son las autonomías ya que el que España tenga 18 mini estados y cada uno con un déficit elevado, ya que ninguno se salva, hace que le sea a este país más complicado el salir de ese gran déficit pues todo está demasiado descentralizado. Es un detalle a tener en cuenta, pese a que mucho no les guste admitirlo.
En definitiva, que puede ser que la crisis en sí se haya acabado, pero los síntomas de haber pasado una tremenda crisis mundial queda, y le queda rato, en España. Habrá que acostumbrarse a vivir con estos síntomas hasta que poco a poco vayan pasando.