No es mala película. Y, de hecho, todos los intentos que haga el cine español por hacer películas de ciencia-ficción hay que darles la más sincera enhorabuena: tienen el suficiente talento (aunque no tengan mucho presupuesto) para poder hacer grandes películas; solamente faltan las ganas. No hace falta que hagan solo películas de la guerra civil, franquismo y pre-guerra civil…
La trama es un poco lenta, y el final no es que sea demasiado bueno ya que acaba abruptamente, pero se puede ver. Una especie de «entes» extraterrestres parece que han invadido el mundo y cuando se van acercando a las personas le sugestionan mentalmente para que se suiciden.
La gracia de esto es que el protagonista, el actor Mario Casas, es una especie de… ¿pastor religioso? que se dedica a provocar a que la gente se suicide y ve como sus almas van al cielo. Al final se tiene que enfrentar contra una especie de secta que no tiene mucho respeto por lo que va pasando y al final gana la pelea.
Documental turístico gratis para Barcelona, para variar, gran actuación de Mario Casas, y poco más.
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