Hoy en Oconowocc dedicamos nuestro artículo principal a dar unas pequeñas pinceladas sobre qué hacer para salvar los negocios de cada uno si está siendo atacado y machacado ante esta grave crisis económica que, durante el 2012, será aún peor según dicen. Con este artículo no se quiere dar una «receta mágica», ya que lo que se va a proponer son unas ideas generales económicas de lo que hay que hacer: la labor de los administradores y/o gerentes es aplicar estas normas al marco de circunstancias de la propia empresa de cada uno.
A grandes rasgos, lo que habría que hacer, en aras de que Oconowocc quiere ayudar a los negocios en crisis, es lo siguiente:
1) Mentalizarse, antes que nada, que el sistema capitalista de antaño ha muerto y que jamás va a volver a ser el mismo. Si antes se tenía un nivel de vida de, por ejemplo, 8 sobre 10, prepárate a tenerlo solamente de 5 sobre 10, ¡y gracias!. Ahora estamos en lo que se llama «economía de guerra», que, aunque no estemos en guerra física, sí que estamos en guerra económica.
2) Búscate unos buenos asesores pues la legislación laboral, fiscal y jurídica está cambiando constantemente cada semana, y lo que hace unos días se podía hacer puede ser que ahora no o que se busque otra opción pues sea más rentable. Nosotros en Oconowocc recomendamos IM Asesores, en la Calle Gorgos 27-5 de Valencia, por supuesto.
3) Si eres una sociedad limitada o anónima y estás pasando por una situación angustiosa, ¿te has planteado buscarte a un socio de confianza para que sea capitalista de la empresa? Es decir, a veces, hacer una ampliación de capital buscándote a otro socio, repetimos, de absoluta confianza, es mucho mejor que pedir préstamos a los bancos que han cerrado el grifo del dinero de manera generalizada.
4) Tus deudas a corto plazo deberías hacer que fueran a largo plazo, para ganar en «cash», es decir, en liquidez. Si tienes deudas con la Agencia Tributaria, las puedes negociar sin problemas. Habla con los de Hacienda y cuéntales la situación; por regla general si has cumplido con los plazos mensuales de las deudas aplazadas y/o fraccionadas, te reconsiderarán tu deuda. Con la Seguridad Social es más complicado pues son más inflexibles, pero para evitarse embargos, haz ingresos a cuenta, y los evitarás en el supuesto caso de que no te quisieran fraccionar la deuda.
Negocia con los proveedores y, en la medida de lo posible, con tu banco, para financiar tu deuda a largo plazo y pagar menos al mes. Consigue que tus proveedores «se bajen del burro» y que reduzcan un poco sus precios, que al fin y al cabo todos estamos en crisis.
5) Si eres una empresa con maquinaria o varios coches, ¿te has planteado vender algo, pues ahora hay menos faena que antes? Si tienes 2 o 3 máquinas de las que a pleno rendimiento por faena solo funciona 1, ¿podrías vender la que no uses tanto y rentabilizar la máquina que sí usas? Lo mismo con los vehiculos que tienes. ¿Podrías vender los que no uses, si tienes varios, y usar el tuyo propio como para el trabajo, incluso rotulándolo (y de paso demostrar a la Agencia Tributaria que gracias a eso es una prueba de que te lo puedes deducir como gasto de empresa)?
6) Si tienes mucho stock en el almacén significa que utilizas demasiado dinero en compras que luego no se vende. Reduce cuánto puedas el stock; el almacén simplemente tiene que ser un lugar provisional donde el producto se venda, no que se «almacene», valga la redundancia. Para almacenar de verdad están los trasteros.
7) Otro punto interesante es que, para vender más o prestar más servicios si somos una empresa de servicios, haz descuentos: descontar, hacer ofertas, rappels por ventas,etc… Estimula tus ventas y fideliza a los clientes que te queden.
8) Y último: quizás sería conveniente tener algún comercial que otro, aunque cueste dinero, para conseguir más clientes. La inversión en publicidad es una partida que nunca debería de desaparecer, sea que la empresa vaya bien o mal. El gerente o el administrador pueden salir de su despacho tranquilamente y dedicar su tiempo a conseguir clientes. En tiempo de bonanza no hacía falta gastar las calles, como se suele decir, pero ahora es necesario; y mejor que el mismo gerente que hable bien de su empresa con el objetivo de conseguir clientes, no habrá nadie.
En definitiva, son algunos consejos o recomendaciones para intentar paliar la crisis. Algunos son obvios, pero por obvios que sean en la realidad no se hacen. Esperemos que esta información sea de utilidad para aquellos que la lean y tengan negocios en crisis.