No pudo ser. El Valencia lo intentó pero se dejó ganar por una banda que son los del Schalke 04, por que ni en la ida ni en la vuelta hicieron mucho, pero lo poco que hicieron sirvió para eliminar al Valencia. El árbitro se comió en el mismísimo minuto 86 un claro penalty a Mathieu que hubiera sido el 2 a 2 y hubiera clasificado al Valencia, pero… no lo pitó y el Schalke decidió.
Un claro partido de Champions que, si el Valencia la temporada que viene quiere llegar más lejos, tiene que jugar con más intensidad. Le falta la magia de Silva y el talento de Villa, eso está claro. Pero bueno, como el Valencia es un equipo grande, tiene que tirar hacia adelante, lamerse las heridas, y ahora ganarle al Zaragoza. No puede decaer, ni los jugadores ni el técnico Unai Emery, no pueden hacerlo ahora por que se juega el tercer puesto.
Por desgracia, la historia es asi: el Valencia todos los años tiene que intentar estar en Champions para acostumbrarse a jugar contra los mejores del continente, y este año no ha podido ser pero quizás la temporada que viene llegue y todo a semifinales. Ahora hay que dar ánimos al Valencia, ya llegará el tiempo de eliminar jugadores o no este verano. Ahora más que nunca, ¡amunt Valencia!
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