Sin duda, en la ciudad tenemos una joya que no tiene nada que ver con el famoso turismo de sol y playa, sino para darle un valor añadido en cuestión de negocios: y es el Palacio de Congresos.
Un edificio emblemático en una parte emblemática de la ciudad, que por segunda vez ha sido nombrado el mejor Palacio de Congresos de todo el mundo, y eso es muchísimo, ya que supera a ciudades tan cosmopolitas como Paris, Londres, Nueva York, etc…
¿Se está tratando al Palacio de Congresos como se debería de tratar? Esperemos que sí. Hace años se pensó en una ampliación del mismo que por ahora se ha quedado en agua de borrajas, pero, con estos tremendos datos del éxito que está teniendo, si ampliándolo hace que siga siendo el mejor del planeta, ¿por qué demorarlo? Cuidemos este Palacio de Congresos, ya que hace que el turismo de congresistas en esta ciudad siga tan grande como siempre.