Odiamos escribir esta clase de artículos… pero la realidad es que hay que escribirlos, pese a quien le pese.
El Valencia C.F. discurre por la Tierra sin pena ni gloria, y eso es quizás lógico en equipos de media tabla hacia bajo, pero en un equipo que aspira a estar siempre en Champions y que aspira a ganar títulos, es unas lástima cómo está ahora.
¿Qué ha hecho de bueno y de malo Meriton Holdings? Lo resumimos, según nuestra opinión:
Cosas buenas: está bajando deuda y al menos está manteniendo a flote el club, un club que por culpa de la nefasta gestión de los anteriores presidentes, estaría en causa de disolución.
Ha ganado una Copa del Rey, se llegó a una final hace poco, y creemos que ha convalidado la copa Eva Duarte en la segunda Supercopa de España. Por cierto, el club ha sido el único que se ha puesto en contra de la RFEF… y bien que lo está pagando, en vista de los arbitrajes recibidos… según nuestra opinión.
Cosas malas: después de 8 años no se entiende por qué el club todavía sigue siendo incapaz de acabar un estadio nuevo sin necesidad de ATE, y por qué a estas altura TODAVÍA tenemos que tener jugadores cedidos. Pero lo peor es que no hay comunicación ni conexión entre la propiedad y el aficionado que, al fin y al cabo, el aficionado es el que mantiene el club de alguna manera.
Tres años seguidos sin ir a Europa hacen que los jugadores con calidad se vayan o ni siquiera se planteen venir, y por supuesto la marca «Valencia CF» se va diluyendo como un azucarillo en un café. Éramos grandes, tuteándonos con el Madrid y el Barcelona, y ahora nos tuteamos con los de media tabla.
Por último, lo de los audios del presidente hacen que, aunque sean grabaciones ilegales, deba de dimitir, ya que está todo de mal en peor. El clima y el ambiente es pésimo y no se ven soluciones a corto ni medio plazo. Y la afición ha dicho «basta».
No solo eso, sino que la Generalitat también ha dicho «basta» por los audios que han salido en el periódico SuperDeporte, y eso hace empeorar más aún al club. Y que haya ido a Barcelona para ver si el Barça le compra a Soler y Gayá… pues aún peor, evidentemente.
Así que, Peter Lim tiene un verdadero problema y va siendo hora de que se ocupe de él.
