Como se suponía, Portugal fue un equipo más complicado de batir que Francia. No jugaron dormidos sino haciendo daño no dejando jugar al centro del campo de la Selección Española. España solamente jugó bien en la última mitad de la segunda parte y en las 2 prórrogas, donde maniató al equipo portugués. Cristiano Ronaldo, como siempre, aunque dijo al final de la eliminatoria que era una «injusticia», paso desapercibido totalmente.
Es más, tan «señor» que dicen que es, y simuló varios penaltis que no le sacaron tarjeta amarilla por que era Cristiano Ronaldo, pero era para tarjeta amarilla, sin duda. Criticas aparte de Ronaldo, los jugadores portugueses simularon faltas. Con el «rollo» de que el árbitro era turco, cada falta que no pitaba el árbitro o cada acción de tarjeta amarilla que sacaba a los 4 defensas, el mismo banquillo se le echaba encima como leones, y así el árbitro quedó influido innecesariamente. De hecho, los 4 defensa portugueses fueron amonestados con tarjetas amarillas; Bruno Alves debería haber sido apercibido antes y no en las postrimerias del partido.
Por lo demás, y como ya dijimos en el inicio de la competición, Vicente Del Bosque se equivocó al poner a 2 de sus 3 delanteros. Negredo jugó ayer pero no hizo nada; Torres ni siquiera jugó, y el unico que valió la pena fue Pedro. Una pena lo de Silva; se ve que el ganar la Premier inglesa le ha afectado y no es el Silva de la anterior eurocopa.
¿Qué preferimos en la final del domingo, Alemania o Italia? Alemania, sin duda. Italia nos cuesta horrores eliminarla, y más teniendo en cuenta de que su fútbol es destructivo, el famoso «catenaccio». No juegan, simplemente no dejan jugar al contrario en esa estrategia que les ha dado tantos mundiales. Alemania en cambio sí juega y sabes cómo jugarle, aunque no por eso es más fácil de eliminar. Hoy, segundo partidazo de semifinales, y España lo verá en la televisión, relajándose un poco del partido de ayer.
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