Se ha declarado incluso el estado de excepción tras un terremoto que ayer sacudió el país de Nueva Zelanda de 7,2 grados en la escala Ritcher.
«Está resultando difícil mantener la tranquilidad entre los ciudadanos tras el violento temblor. La mayoría de los residentes de Christchuch han respondido bien, aparte de algunos lamentables casos de saqueo», ha dicho el primer miniestro de dicho país. El seísmo ha sido 28 km. bajo la superficie y ha habido daños por más de 2.000 millones de dólares. Centenares de muertos e innumerables infraestructuras totalmente destruidas.
Es el peor terremoto en 70 años, y aunque sobretodo ha afectado a la capital, otras ciudades también han sido afectadas y continúan sin electricidad y se intensifican los saqueos. Esperemos que el país se recupere pronto, pues todavía tenemos en la retina a casos como Haiti o Chile.