Mala cosa habemus.
Los 11.000 millones de dólares que esperan los principales sectores del automóvil en Estados Unidos han sido frenados, mayoritariamente por los sindicatos, que no aceptan que se de dinero público para esos lares.
Así, Ford, General Motors y similares por ahora al menos, se quedan sin dinero. La Bolsa NIkei de Tokio ha sido la primera en reaccionar con una fuerte bajada. Imaginamos que en el resto de Europa no será diferente.
La noticia positiva es que, en Europa, los 200.000 millones de euros, a pesar de la reticencia de Angela Merkel, gobernanta alemana, sí han sido aprobados. Alemania puso unos flecos adicionales en esa aportación, pero a pesar de eso parecer ser que aceptará.
Los principales alegatos a esa mega aportación fueron que principalmente el dinero proviene de Alemania y parece ser que no son tan generosos. El presidente francés hablaron con ella y a fecha de hoy, se aprueba igualmente la aportación.
Habra que analizar bien adónde van a ir todos esos dineros…