Por mucho que muchos digan, aunque la palabra «muchos» cada mes que pasa es más pequeña, las Jornadas no han sido un éxito. Explicamos el por qué:
En primer lugar, es falso el dato que dicen que ha salido totalmente gratis pues lo han pagado los peregrinos. Falso, ya que posiblemente han sufragado muchos gastos, quizás sea así, pero el coste de haber cerrado todo el centro de Madrid, y el coste de los sobresueldos que se tendrá que pagar a los policias, ambulancias, bomberos y demás funcionarios públicos que tendrá que pagar el Ayuntamiento de Madrid, es muy, muy elevado. Es más, dicen que se habla de unos 50 millones de euros de coste. ¿O a los policias el sueldo se los paga los peregrinos?
Lo de los confesionarios fue de traca. Poner confesionarios públicos tal como alguien pone urinarios públicos en Fallas, es patético, la verdad, por que se hace de un acto, se supone, «venerable», algo vulgar puesto en la calle, y eso ha dado una imágen mala, y para la ciudad de Madrid, también, una ciudad que se supone moderna que pretende unos Juegos Olímpicos. Lamentable.
Lo de las peleas fue lamentable, aunque eso también es culpa de algunos intransigentes de los laicos, ya que al fin y al cabo hay que ser abierto a todo tipo de mentalidades, ¿o acaso se quejan los creyentes de que ocupan ilegalmente la plaza del Sol de Madrid? Creo que no, así que, ya que hay mentalidades diferentes, que haya flexibilidad mutua.
Las formas de venir del Papa fue también algo chocante, tal como vino a Valencia y años después a Santiago y a Barcelona. Es todo un jefe de Estado y se le recibió como tal, como el soberano de un pais pequeño llamado Vaticano. Con su papamóvil, toda la gente recibiéndole, los reyes de España saludándole de manera medio humillante… ¡Qué diferencia con Jesucristo, que si los católicos leen un poco más la Biblia, sabrán que entró en Jerusalén en un asno y la gente no le hacía tantas reverencias! Y qué humildad demostró Jesús cuando dijo «las zorras tienen cuevas (…) pero el Hijo del Hombre no tiene donde recostar la cabeza». Sí, que diferente es el Papa, realmente, todos los Papas que han existido y toda esa parafernalia donde se le hace más caso a él que al mismo Dios.
Esto, ni es normal, ni es bíblico, ni nada. Esta es nuestra humilde opinión de los resultados que ha tenido esta polémica Jornada Mundial de la Juventud.
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