Es evidente que sea la Iglesia quien redacte la materia, ya que trata, no de la Biblia, sino de las enseñanzas del catolicismo, pero esto evidencia que, realmente, no vivimos en un estado laico ni libre, ni democrático.
En España conviven varias religiones reconocidas, no solo la católica. Y que en las escuelas, o estudias Religión (mal nombre pues no es «Religión» sino «Religión Católica») o estudias Educación para la Ciudadania. La pregunta es: ¿por qué no se estudia lo que quieran estudiar los estudiantes? Si no quieren saber nada de la religión católica, ¿por que no pueden estudiar la religión que les venga en gana? Es decir… ¿hay libertad de elección? No, algunos dirán por que no hay infraestructura de que cada religión aporte profesores. Vale, pues… ¿por que no ayudar o a incentivar para que lo hayan?
Por eso, cuando se dice que España es un estado laico, es para reirse un poco, al menos viendo la educación, y viendo la asignación presupuestaria que todavía el Gobierno, por muy socialista que sea, tiene que dar a la Iglesia Católica, como si estuviera en crisis. Concluyendo: España no será un estado laico hasta que se reconozca, en todas las facetas que se tienen que reconocer, que hay diferentes religiones y diferentes formas de pensar.