Se celebrará en Alemania durante todo el año 2013 el aniversario de los hermanos Grimm, aquellos que hicieron cuentos tan famosos como Blancanieves, Cenicienta, Hänsel y Gretel, Rapunzel, La Bella Durmiente, y un largo etcétera en el siglo XIX. Pero… ¿de verdad que los hermanos Grimm, Jakob y Wilhelm Grimm, hicieron esos cuentos infantiles, o hay una terrible realidad detrás de todo esto? Pues… atentos a este artículo, puesto que a más de uno le hará ver los cuentos infantiles… desde otro punto de vista.
En primer lugar, decir que se especula con que los hermanos Grimm no es que inventaran ellos dichos cuentos, sino que por tradición oral en zonas rurales de Alemania ellos los oyeron y simplemente los recopilaron. Hicieron esto, pero debido al salvajismo inicial de sus cuentos, tuvieron que suavizar extremadamente el contenido de los mismo ya que tenían que ir dirigidos al público infantil. ¿Suavizar por qué? Por que inicialmente no eran así de «bonitos» los cuentos. Vamos a dar algunos ejemplos:
La Cenicienta: al parecer, el cuento original decía que para que el zapato de cristal pudiera caber en el pie de la preciosa Cenicienta, tenía que cortarse un dedo, y mientras el príncipe veía cómo sangraba el pie de la pobre muchacha, se daría cuenta de que ella realmente sería su amor verdadero. Su hermanastra se dió cuenta de esto y se cortó el talón para que también le sangrara y consiguiera engañar al príncipe, pero un cuervo que pasaba por ahí advirtió del posible engaño… y como castigo, le arrancó los ojos de cuajo a sus malvadas hermanastras.
Blancanieves: ¿qué castigo tuvo la madastra cuando al final Blancanieves se salió con la suya? Que le sustituyeron los zapatos con hierro al rojo vivo y le obligaron a bailar delante de ella hasta que muere. ¿Y por qué competía la madastra con su hijastra Blancanieves? Pues… no era por comida sino por que al parecer Blancanieves tenía más posibilidades de tener más relaciones sexuales que su madastra, por eso le cogió celos.
Hänsel y Gretel: Terrible historia, ya que al parecer había una hambruna muy grande, y el cuento original de los hermanos Grimm contaba que la madastra le decía continuamente a su marido que abandonara a sus hijos a su suerte en el bosque por que no podía cocinar para tantas bocas, o la segunda posibilidad era cocinarlos a dichos hijos. Como el marido evidentemente no quería, la madastra se convierte en bruja, hace una casa hecha de alimentos y casi engaña a los inocentes niños para que entren y los metiera en un horno de fuego. Jo, qué bonito.
Y estos son solo unos cuantos ejemplos de los cuentos más famosos… hay por ahí otro menos conocido que se llama Rapunzel, el de la niña con trenzas muy largas y que está encerrada en lo alto de una torre, y que todas las noches cantaba para que un príncipe la rescatara. Y vaya si le rescató, pero antes… el cuento original dice que el Príncipe la visitaba para tener relaciones sexuales y por eso tuvo gemelos 9 meses después. ¡Cómo cambió el cuento!
¿A qué contado así el cuento cambia un poquillo? Pues esa, al parecer, es la terrible realidad de los cuentos de los Hermanos Grimm. Ahora veremos quizás a Blancanieves o a Caperucita Roja desde otro ángulo…
