¿Véis, europeos, como es que se puede hacer una serie de ciencia-ficción, sin explícitas escenas de sexo y con episodios ágiles, misteriosos e interesantes? Francia lo ha logrado, y le aplaudimos. No hace falta que sea estadounidense para hacer buenas series.
«Missions» trata de un futuro muy cercano, donde se quiere enviar una nave a Marte para vivir en el planeta, o al menos dejar una mini base para que los siguientes tripulantes puedan empezar a construir. Los protagonistas no son los primeros en establecerse en Marte, ya que en solamente 3 semanas y gracias a un motor revolucionario, una empresa gigantesca lo logra pero… desaparecen. La misión de esta nueva nave es saber qué les ha pasado y establecerse allí. Pero empiezan con misterios, ya que, para empezar, encuentran vivo tirado en el suelo al astronauta ruso que desapareció intentando aterrizar en Marte hace más de 60 años, pero aparenta que no ha pasado nada de tiempo.
Otro misterio es la inteligencia artificial de la nave, que desde que entra el astronauta ruso se vuelve loca y va evolucionando. Pero lo más extraño es cuando descubren que el ADN del astronauta no es humano sino que tiene parte alienígena parte de ordenador, lenguaje informático. Y para que pasen más cosas misteriosas, descubren una pequeñita construcción de una aleación que nadie conoce, la misma que la del presunto astronauta ruso.
La chica tiene mucho que decir, ya que al parecer es el enlace entre la Tierra y Marte, cosa que todavía no se sabe qué significa eso pero a lo largo de la temporada se verá.
Sin duda, recomendamos la serie.