Una película basada una vez más en la novela de este famoso personaje y sus amigos mosqueteros. Como primera referencia, no está mal y en algunas escenas la espectacularidad del montaje que hacen con los barcos voladores tipo zeppelin es muy buena, aunque la Milla Jovovich parece que está actuando todavía en las películas del videojuego Resident Evil por sus peleas, y el bueno de Orlando Bloom parece que actúe como el capitán Sparrow más que representante del gobierno ingles.
El argumento es el conocido por la novela: los 3 mosqueteros, Athos, Porthos y Aramis, son soldados pasados a mejor vida pues el rey de ahora casi ni les conoce y se dedican a pelear y beber más que otra cosa. Tras descubrir una malévola conspiración para derrocar al rey por culpa del cardenal Richelieu, los mosqueteros se cruzan con un joven que aspira a convertirse en héroe, D’Artagnan, y lo toman bajo su tutela.
Juntos, los cuatro emprenden una peligrosa misión para frustrar el complot que amenaza no solo a la Corona de Francia, sino al futuro de la propia Europa pues se hundiría en guerras interminables. La gracia de la película como hemos dicho son la máquina de guerra inventada por Leonardo Da Vinci, los planos de un barco que va por el aire mediante un zeppelin y además dotado de cañones tipo metralleta y las absurdas peleas de la buena de Milla tipo Resident Evil. Claro, el director es el marido de Milla y también director de la saga famosa de Resident Evil. Todo queda en casa.
La aventura también se transforma en una historia de amor entre el jóven D´Artagnan y una de las damas de compañía de la reina y al final consiguen tumbar el plan del cardenal Richelieu pero al final de la película… ¡tachán! Sale el representante de Inglaterra que va directo a conquistar Francia con una tremenda flota de barcos voladores (máquinas de guerra) y barcos normales.
Pero eso se verá en la segunda parte de Los Tres Mosqueteros, del que por ahora no se ha anunciado fecha de inicio del rodaje. La recomendamos pues es buena de ver y es espectacular, aunque el argumento es bastante simple.