Los bancos van de capa caída, Estados Unidos va al filo de la navaja de otra bajada de nota de solvencia, y los ataques especulativos a España, Italia y ahora a Francia están siendo devastadores. Además, los mercados y Bolsas económicas mundiales están bajando y bajando. Es más, hoy el Ibex35 ha bajado de los 8.000 puntos, cuando en el 2008, justo antes de la crisis, llegó a estar por los 15.000. Europa no reaccciona y los demás países se contagian también de la incertidumbre de EEUU.
El oro, que está subiendo por las nubes, la onza ya se paga a 1.500 dólares, cifra bárbara, y este lunes pasado fue el llamado Lunes Negro, en el cual todas las Bolsas bajaron estrepitosamente. Hubo repuntes enre ayer y hoy pero en general todas han vuelto a bajar, y el BCE no sabe qué hacer ni reaccionar; no calma los mercados y estos van hacia abajo.
La prima de riesgo, al menos, la de España, no ha vuelto a niveles de 407 puntos básicos pero ha subido a los 379, alto, demasiado alto todavía. Y esto pasa en todos los países. Si nos vamos al continente sudamericano, las Bolsas de Brasil, Argentina, Chile, todas han bajado y han perdido puntos. ¿Y todo eso por qué? Por que no hay confianza en que vuelva más o menos a recuperarse la «alegría» inversora. Los inversores de acciones se pasaron a invertir en Tesoro Público pero claro, ahora se ve también que empieza a ser poco rentable.
En definitiva, un panorama poco favorable para la economía, y la palabra «recesión», pero mundial, empieza a asomarse en casi todos los países civilizados. La incompetencia una vez más, del BCE, del Fondo Monetario Internacional, y en general todos los organismos económicos mundiales relevantes, son unos negados. Y mientras, los pobres, nos quedamos viendo impasibles las noticias en los telediarios, preocupados por qué va a ser de nuestro futuro inmediato.
PD: Sí, puede sonar un artículo un poco pesimista para ser pleno verano, pero… es que es lo que hay!
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