Luis Aragonés solo había uno. Ese Luis que ahora todo el mundo le hizo un homenaje cuando se gastaron todas las células del cuerpo en salivar de las críticas que le derramaron cuando tuvo la valentía de quitar a Raúl, un peso muerto dentro de la Selección Española y a no hacer caso sobretodo a las alineaciones que les obligaban desde los periódicos meseteros.
Ese Luis Aragonés por desgracia no está, y Vicente del Bosque tuvo éxitos gracias a seguir la sinergia de Aragonés. Pero la sinergia se ha acabado ya, y Del Bosque está volviendo a los vicios de otros entrenadores pre-Luis Aragonés, a que les impongan las alineaciones desde Madrid y así le está yendo a la Selección, a la mal llamada «Roja», que está perdiendo su identidad propia.
Y es que los jugadores ya no son los de antes, y tienen que dar paso a otros jugadores mejores, que los hay, en la Liga española. Falta que Del Bosque sea un tío valiente tal y como lo fue Aragonés y no haga caso desde la meseta mediática y ponga a los que él crea que son mejores. Si no se hace la transición así, poco tiene que hacer. Aún estamos esperando que desde Madrid diga que tiene que poner a Torres, a ver qué pasa…
Deja una respuesta