Una serie con mayúsculas: The Blacklist (La Lista Negra). Un protagonista que es ni más ni menos que un recuperado James Spider en un magnífico papel que hace de ex-criminal internacional que, sin saber todavía las razones, se entrega al FBI voluntariamente y quiere hablar con una agente en particular para empezar a desvelarle la llamada «lista negra».
La «lista negra» es una lista de criminales hiper peligrosos los cuales muchos de ellos ni siquiera tiene conocimiento el mismo FBI y solamente a la agente Elizabeth Keen le va diciendo episodio tras episodio algún miembro de dicha lista para que el FBI pueda atraparlo. Cada amenaza atrapada es un peligro menos para el mundo.
Pero claro… ¿por qué exactamente este terrorista, Raymond Reddington (James Spider), al parecer se «arrepiente» de su vida anterior y empieza a dar esa lista para que a todos los atrapen? ¿Qué papel juega el marido de Keen, que al parecer no es lo que parece? ¿Y qué relación hay entre Reddington y Keen para que este se sienta tan atraído hacía ella…?
A lo largo de esta primera temporada se sabrá y comentaremos algunos detalles jugosos.
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