Y nos parece que el final de la serie también, ya que la productora «Zulu» no está por la labor de renovar por una segunda temporada. Una pena, pero le faltaba meterse en una quinta marcha que no llegó a ponerse.
Por fin se conoce la historia del protagonista, el por qué no fue astronauta, y es por que su hija no está de acuerdo en que se vaya y tiene incluso pensamientos negativos de suicidio, y evidentemente no ven correcto los jerifaltes de la NASA el hecho de que se vaya estando así su familia; además, posiblemente no estaría con la cabeza centrada al 100%. Pero… la oportunidad le vuelve a llamar, ya que uno de los tripulantes desarrolla una infección en el oído grave que no se le cura, y eso hace que al final no vaya a ir, y por tanto, se vuelve a pensar en el protagonista para que ocupe el sitio dejado por el astronauta enfermo.
Habla con la hija, y más o menos hacen las paces, y al final, embarca en el cohete «Providence II», y está ve no explota, menos mal. Y así acaba la temporada, habiendo recargado el combustible en la Estación Espacial Internacional y al final van rumbo a Marte.
Si hubiera una segunda temporada, que no va a ser el caso me temo, explicarían cómo va el trayecto hasta Marte y cómo montan la primera base marciana… pero eso será en otra ocasión.
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