Hala, ya está. Esas «depredadoras» terrazas que contaminaban el Mediterráneo, esas terrazas que destrozaban las playas, esas terrazas que hacía que hasta los peces del mar se fueran a otros países… se han ido, se están desmontando, esa gran «amenaza» que representaba, se está diluyendo. Ya lo han conseguido desde el Ministerio del Medio Ambiente.
Enhorabuena: han conseguido que unas 50 personas vayan a engrosar las ilustres listas de paro, que las terrazas pierdan el 60% de su servicio y que no se puedan organizar eventos como en las mismas por que tienen que dar paso al paseo original marítimo de Valencia. Eso si, en Andalucia y otras comunidades litorales si que las dejan poner, será que el Mediterráneo en Andalucia y en Valencia no es el mismo…
Ya lo han conseguido. Muy amables, los señores del Ministerio de Medio Ambiente. ¿Qué mas van a hacer a partir de ahora? ¿Nos quitarán el derecho a bañarnos ya que ensuciamos el mar? ¿Nos quitarán el derecho a poner sombrillas, ya que agujereamos la arena, y eso está muy re-mal? Cuidado, que no hemos visto la última escena ni la última batalla…