Si es que está claro que no nos quieren allí. Y solamente nos aguantan ya que España fue uno de los miembros fundadores, pero si no es por eso, hace años que ni se estaba en las fases finales.
Y tampoco les gusta la música, eso esta más claro aún. Ganan los desechos musicales que con una letra más o menos social, ¡que mas da lo que se cante!, con tal de decir cosas bonitas para encandilar a los progresistas europeos estos.
La canción contra el bullyng siempre es bueno hacerlo por el tema candente del acoso a algunos niños, eso está claro. Con eso no nos metemos. Pero… ¿de verdad una canción la cual solaente hace sonidos guturales y del inframundo es lo suficientemente buena para ganar Eurovisión, muy por delante de nuestros Amaia y Alfred que cantaron muy bien? No para ganar (sobretodo por la voz extraña de Alfred…) pero al menos para quedar los 4 o 5 primeros, sí. La canción técnicamente fue perfecta; pero como siempre, mandemos lo que mandemos, nos ponen el antepenúltimo.
Así es Eurovisión: premia lo raro y relega lo autentico.
Deja una respuesta