No, no la recomendamos ya que si no es por Jason Staham… no vale, así de simple. Le pasó igual que la serie sobre Transporter, que por mucho cara de tipo duro que tenga el protagonista, no vale la pena verla.
La película trata de que va a ver a su padre, que es millonario, algo que no había pasado nunca en las anteriores películas de Transporter, y le secuestran para obligar al protagonista a ayudar a 3 chicas a una misión. Lo hace, y luego en un curioso juego de acontecimientos le vuelven a secuestrar esta vez los malotes de verdad.
Como es bien sabido, el protagonista consigue solucionar toda la papeleta. Persecuciones intensas, peleas divertidas… incluso espectaculares, pero… no es Jason Staham. Así de sencillo, nos tememos.
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