No es nuestro personaje de cómic favorito, la realidad es que está entre los 10 primeros, y los 4 primeros son marvelianos por supuesto, pero ayer hizo 75 años de su existencia y como en esta página su principal motivación son los comics, hablaremos de ello.
Un 18 de abril de 1938 salia a la venta dentro de un periódico de amplia difusión en los Estados Unidos la primera tira de Superman. Un Superman muy diferente al de ahora, ya que no volaba sino saltaba, y se encargaba de denunciar los abusos sociales de la época. Es decir, lejos de los grandes supervillanos de lo que trata los comics de ahora. De orígenes humildes, los creadores de Superman hicieron la invención del superhéroe moderno del siglo XX y con él darían orígen a la realidad de las 2 grandes editoriales de ahora: Dc Comics y Marvel Comics.
–> Superman de John Byrne
Más adelante en el tiempo, y tal como pasó con Manuel Gago y la Editorial Valenciana con El Guerrero del Antifaz, les quitaron los derechos y les dejaron casi en la miseria al pobre Joe Schuster y Jerry Siegel, los creadores de Clark Kent. Tras años y años de luchas y peleas contra DC Comics, al final hicieron un acuerdo y compartían de alguna manera los derechos de este personaje.
75 años de existencia lleva Superman, un Superman que ha evolucionado mucho aunque no lo suficiente, como suele pasar en los personajes de DC Comics. Por ejemplo, allá a finales de los 80 se anuncia su compromiso con Lois Lane allá en un bar de Metrópolis donde le enseña su anillo de compromiso ante un sorprendido y contento Jimmy Olsen. Y curiosamente, 7 u 8 años después, se casan… para luego en el reboot de DC Comics volverlo a convertirlo en soltero y en un niñato malcriado, a raiz de los primeros números de Superman en The New 52.
–> Superman de Todd Mcfarlane
En definitiva, creemos que le queda todavía un largo recorrido a este personaje, y esperemos que en DC Comics lo valoren como se merece. No siempre van a tener que matarlo ante un monstruo llamado Doomsday para que vuelva a tener cifras de ventas rentables.
Nuestro gran respeto y nuestra consideración al que fue y es el primer superhéroe moderno que existió en el cómic.
