Tendría gracia que después de todo lo que han dado por saco clubes como el Real Madrid y el Barcelona, al final Villa se quedara. Solo tengo un punto negativo a que se quede: a que con esos 42.000.000 de euros que ofrecía el Barcelona se podría haberle dado un empujón al nuevo estadio, para que no se atrase mas.
Pero, a pesar de eso, y a pesar de queconfian en una ampliación de capital en el Valencia para que puedan seguir adelante, desde luego hay que ver la fuerza que ha tenido Manuel Llorente para soportar durante muchas semanas el empuje, la presión y las ganas de marear la perdiz del Real Madrid, el Barcelona y los medios de comunicación, tanto periódicos como canales de televisión, que veían en Manuel Llorente la figura de un ogro.
Se dice que el presidente más duro en negociar en primera división es Lendoiro, del Deportivo, pero me parece que es o casi, Manuel Llorente, por que ha aguantado las embestidas incluso del mismo Villa, que es duro.
Ahora, si al final se queda, que no se sabe a ciencia cierta todavía, Villa tendrá que ganarse a la afición otra vez. Lo bueno es que Villa, por si acaso, nunca ha dicho nada públicamente y puede salvar un poco su imagen por eso, y decir alguna absurdez como que «nunca ha querido irse del Valencia, era mi agente» o «siempre he querido hacer lo que conviniera al Valencia». Chico, tu di eso y aunque nadie se lo crea, al menos quedas lo suficientemente bien para que no te piten cuando salgas al campo.
Ahora, visto que muy posiblemente se quede, a ver si hacen un equipo competitivo que luche por títulos.