La verdad es que cada vez más las televisiones privadas lo están consiguiendo: dan más ganas de ver solo series o leer libros o tebeos, o simplemente dan ganas de tirar la televisión a la basura. Menudos peñazos dan últimamente. Y ahora que cualquier es famosillo o famosilla gracias a que se ha acostado con unos u otros, lo utilizan para las chorradas más chorras posibles.
Y como Telecinco es la reina de las chorradas, por que evidentemente hay gente que lo ve, Antena 3 ha pensado que también tiene que hacer chorradas, con lo que los dos pseudo-canales han sacado 2 concursos igualitos: «Mira quien Salta» y «Famosos al Agua», cada uno más estúpido que el otro, porque se trata de ver a famosos tirándose por el trampolín. ¿A qué es divertido?
En Telecinco lo han «girado» de tal manera que ahora los famosillos de 2 pesetas tienen problemas entre ellos, a modo de Gran Hermano, quizás para diferenciarse del de Antena 3. Veremos a ver qué se les ocurre a estos últimos para igualarles en nivel de estupidez.
La pregunta es: ¿el Gobierno, o la Defensora del Espectador, o yo qué se quien, no puede echar mano a la absurda programación de estos canales? Claro, alguien puede decir que si no quiero verlo, que no conecte con ellos. Razón tiene, y eso es precisamente lo que hago, pero… ¿es necesario darles la vuelta a los famosillos de tal manera ahora tirándoles por un trampolín? ¿Qué será lo siguiente?