Una de las joyas turísticas que tiene la ciudad de Valencia es su excelente zoológico, el Bioparque o en valenciano, el Bioparc. Uno de los mejores del mundo (y no lo decimos nosotros, sino que lo dicen prestigiosas revistas nacionales e internacionales) donde se realiza lo que se llama la «zooinmersión», es decir, no verás a los animales en jaulas, sino en zonas de parque simulando la Sábana africana donde trascurren a sus anchas todo tipo de animales que normalmente no se ven en los zoológicos de las ciudades más grandes del mundo.
De hecho, la cueva de Kitum, una zona donde hay peceras gigantescas donde aparte de hipopótamos se ven toda clases de peces del río Nilo y de los mares de la zona de África, es una zona relativamente nueva que se hizo después y consigue abarcar un espectro de fauna que no se ve normalmente.
En el anfiteatro podemos ver una recreación de cómo es un día y una noche en África, y podemos ver aves e incluso animales en libertad haciendo caso a los entrenadores que no se ve en ningún otro zoológico: chacales, buitres leonados, grullas, etc…
Si quieres ver bien el Bioparc, aproximadamente en 3 horas lo puedes ver entero y sin prisas, y luego puedes quedarte a comer allí ya que tiene varios restaurantes a tu disposición. Importante el parking que te cuesta 5 euros cada 10 horas, con lo que te da tiempo para verlo todo, y repetir, para mayor diversión de la familia, con un coste mínimo.
Desde luego, recomendamos a todo visitante turista o foráneo de la ciudad a que vaya a ver el Bioparc, ya que es una experiencia inolvidable.
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