Justicia social, si señor. Las amas de casa en una sentencia que dicta jurisprudencia sin precedentes en este país están de enhorabuena ya que, justamente, se les concede el estatus de «trabajadoras». Y es que… ¡lo son!: planchan, friegan, barren, hacen de enfermeras, de cocineras, de camareras, cuidan a los hijos, economizan la casa… muchas cosas hacen que hace que se merezcan ese reconocimiento.
Concretamente ha sido en un juicio de divorcio donde al ama de casa le tenían que indemnizar por todos sus años de trabajo en la casa; es decir, no hace falta que no haya tenido un sueldo concreto para indemnizar, sino simplemente con su carga de trabajo. Eso es algo que aparte de crear jurisprudencia como hemos dicho antes, abre la puerta a futuras cotizaciones y otros privilegios y pensiones que puedan cobrar. Es más, en otros paises ya se hace, por ejemplo, Argentina, donde el Gobierno da una pequeña paga a las amas de casa.
Hasta un 27% se calcula que las amas de casa contribuyen al PIB anual español y no reciben nada, según unos estudios económicos que se hicieron hace 3 años, con lo que pensamos que es totalmente justo que se haga esto. Más o menos, unos 10.000.000 de mujeres ejercen de ama de casa.
El problema es qué hará el Gobierno ahora, pues lo que menos está dispuesto es a pagar más ahora teniendo en cuenta como está la economía, cada vez peor, pero digamos que esta sentencia es el primer paso.
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