¡Por fin! Un clásico del cómic Marvel de todos los tiempos se hace realidad, en el décimo episodio de la segunda temporada de Luke Cage.
Y es que menos mal que Daniel Rann (Iron Fist) va a su amigo Luke a su «base» de operaciones, por que Cage está perdido: no ha podido contra Amaia, que está más sangrienta que nunca y quema vivo a unos cuantos de un restaurante: Bushmaster sigue suelto y con ánimo de venganza, y en todo Harlem están persiguiendo a todos los jamaicanos, sean culpables o inocentes, por temor a esta guerra de bandas que ya ha comenzado.
Iron Fist va a ayudarle, para darle calma y serenidad y ayudarle a recuperar su «chi», como él siempre dice. Al principio cree que son tonterías, pero poco a poco se irá dando cuenta de que los consejos de Iron Fist son buenos, y juntos, harán una de las mejores parejas del cómic norteamericano.